Oriana Marín
Portfolio
©2013 Oriana Marín
Noche

La noche ha sido territorio de misticismos¬, de miedos antiguos y nuevos, de historias fantásticas, de secretos. Ha sido inspiración para la creación de personajes que han tomado muchas formas y nombres pero que han perdurado a través de la historia. En la noche la vida cambia, tiene otro ritmo, otros habitantes, otras cotidianidades.

“Noche” la componen una serie de fotografías análogas instantáneas tomadas en distintos lugares dentro de la isla de Providencia, Colombia. Este lugar, a diferencia de su isla hermana San Andrés, es un lugar de pocos habitantes, solitario, tranquilo, donde la cotidianidad no lleva el agite de cualquier ciudad cosmopolita. Sus residentes están más conectados con la naturaleza de la isla, con el mar y la selva, porque en muchos casos su sustento depende de esto. La tecnología ha llegado hace mucho tiempo pero no es primordial, hay pocos carros, muchas motos y bicicletas, el turismo es frecuente pero no excesivo. Es un lugar con una personalidad propia, un pequeño paraíso.

En sus noches se siente la calma meditativa del día, pero es oscura, al punto en que se pueden ver perfectamente constelaciones y estrellas, es fresca, el olor es diferente, se despiertan las plantas nocturnas y sueltan su aroma, y los animales nocturnos y se escuchan sus conversaciones y rutinas sonoras. Lo que permanece imperturbable del día son los objetos inanimados que hacen parte del paisaje construido por los pobladores. Estos objetos resaltan la particularidad de la vida de la isla y son habitantes tanto diurnos como nocturnos.

Esta obra es una compilación de retratos de estos objetos iluminados únicamente por la luz del flash de la cámara instantánea. Esta iluminación los hace protagonistas en la imagen dejando lo demás oscuro y en misterio. La fotografía instantánea, comparada con otros medios análogos, registra y muestra la imagen capturada en el momento, y, a diferencia de la fotografía digital, convierte de inmediato la imagen en un objeto. Refleja la espontaneidad del fotógrafo en su recorrido, y en este caso, mi recorrido nocturno por la isla en contraposición a la quietud y permanencia de los objetos retratados.

El formato de la fotografía vuelta objeto es íntimo, son objetos que se vuelven personales, caben en un bolsillo o incluso en la billetera (algo que llevamos siempre con nosotros) a demás están enmarcadas por un borde blanco dispuesto a alguna frase o palabra aludiendo a ese recuerdo que acaba de ser captado. Las fotografías que hacen parte de la obra son reproducidas y ampliadas a un gran formato para transmitir y ampliar esa intimidad dejando este marco en blanco para que el espectador imagine algún recuerdo, convirtiéndolas en ventanas hacia un momento y hacia el lugar que es Providencia.

©2017
Oriana
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